Es agosto en una pequeña ciudad de costa, en plena temporada; cae una lluvia torrencial y hace varios días que la ciudad parece desierta.Todos tienen deudas y viven a base de créditos.
Por fortuna, llega un ruso forrado y entra en un pequeño hotel con encanto. Pide una habitación. Pone un billete de 100 € en la mesa del recepcionista y se va a ver las habitaciones.
El jefe del hotel agarra el billete y sale corriendo a pagar sus deudas con el carnicero. Éste coge el billete y corre a pagar su deuda con el criador de cerdos. A su turno éste se da prisa a pagar lo que le debe al proveedor de pienso para animales. El del pienso coge el billete al vuelo y corre a liquidar su deuda con la prostituta a la que hace tiempo que no paga. En tiempos de crisis, hasta ella ofrece servicios a crédito. La prostituta coge el billete y sale para el pequeño hotel donde había traído a sus clientes las últimas veces y que todavía no había pagado y le entrega el billete al recepcionista.
En este momento baja el ruso, que acaba de echar un vistazo a las habitaciones, dice que no le convence ninguna, pide al recepcionista que le devuelva su billete y se va. Nadie ha ganado un duro, pero ahora toda la ciudad vive sin deudas y mira el futuro con confianza!
3 comentarios:
Pues sí, es bastante curioso..jaja
Menos mal que la puti le debía dinero al recepcionista, de lo contratio hubiese tenido que pedir el pobre otro préstamo...
ES CURIOSO ESE CORREO QUE TE HAN ENVIADO
POR LO MENOS LA MARI TENIA LOS 100€ JAAJAJ APRA PAGAR AL RUSO.UN BESO ADA
la vida te da sorpresas...
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